Para los profesionales de la instalación y el mantenimiento de piscinas, el boroscopio ofrece grandes ventajas a la hora de comprobar el estado interno de la red de tuberías que compone el conjunto de la instalación y detectar los problemas que pueden existir.
Los boroscopios adecuados para realizar este tipo de inspección deben contar con cámaras de reducidas dimensiones que ofrezcan una imagen clara para poder realizar un diagnóstico certero sobre el estado de las uniones, fisuras por donde se produce la fuga de agua, sedimentos, cascotes, invasión de raíces o cualquier otro elemento que esté produciendo un mal funcionamiento en el sistema.
Los sistemas de redes que encontramos en las piscinas disponen de tuberías resistentes a la presión con trayectos en los que se presentan cambios de dirección como codos y empalmes, por lo que se hace necesario un sistema capaz de adaptarse con facilidad.
Diámetro de utilización
Ø20 y Ø80 mm
Especialmente concebida para operar en redes de tuberías y sistemas industriales con diámetros de tubo reducidos y recorridos no lineales.